Osmin Avalos [Guatemala]
“Los paradigmas han cambiado, las fronteras se han cerrado pero el espacio digital se ha abierto en magnitud sin precedentes.”
El 2020 está por finalizar y el 2021 no pareciera ser tan diferente del año que ya hemos vivido. Estamos seguros que muchas verdades antes incuestionables ahora cambiarán y se actualizarán a las necesidades actuales. Debemos tomar como punto de partida el 17 de Noviembre de 2019 cuando se identificó por primera vez en la ciudad de Wuhan los primeros casos de Neumonía atípica, no sería hasta el 31 de Diciembre del mismo año en que La República Popular China comunicara a la OMS la presencia de SARS-CoV-2. Un virus que llegó para quedarse y aunque mucho se ha mencionado ya sobre este tema, es de suma importancia considerar que se cumple un año desde que el mundo cambió y mientras no exista una vacuna eficaz es difícil predecir cuándo podremos volver a socializar presencialmente. Es importante definir en línea de tiempo el mundo “pre-Covid” y “post-Covid”.
Los paradigmas han cambiado, las fronteras se han cerrado pero el espacio digital se ha abierto en magnitud sin precedentes. Debemos considerar este fenómeno y las formas en que esto altera y modifica el futuro de nuestras profesiones, pues durante un año hemos ejercido profesionalmente en un mundo de realidades mixtas, híbridas y remotas como individuos hiper-conectados, habitando un mundo físico, pero experimentando uno virtual. Vinicius Covas, Doctor en Comunicación menciona en su libro “Creando Marcas en la Era de las Distracciones” como nos hemos convertido en una sociedad de consumo de pantallas en donde alcanzamos ya las 65 horas por semanas respecto al uso del teléfono móvil, sumado a esto debemos considerar las horas laborales que ahora nos vemos obligados a cumplir desde nuestros hogares, frente a un computador.
Previo al aislamiento social era inimaginable que muchas compañías ofrecieran trabajo remoto para sus empleados, sin embargo ahora esta es nuestra realidad. Quiero enfatizar las posibilidades profesionales que el espacio digital ha permitido durante los últimos meses, pues dentro de este contexto existe brecha de oportunidad y cambio hacia un mercado digital y global con mayor apertura. Internet posee 60 Trillones de sitios web en más de 75 millones de servidores, nuestros trabajos dependen en gran medida del mundo virtual.
El teletrabajo nos ha expuesto fuera de nuestro territorio físico, ya que de manera colaborativa, outsourcing y freelance es posible dar servicios de profesionales para diferentes continentes mediante plataformas digitales como “Fiverr” y “Upwork” las cuales facilitan la oferta y demanda de servicios profesionales online, sin embargo, estas solamente regulan a los usuarios afiliados a ellas y aunque existan anexos y asociaciones a colegios profesionales de países secundarios al de residencia los cuales nos permitan ejercer legalmente en ellos estos suelen ser aprobados luego de acreditar mediante evaluaciones si el candidato postulante es apto para ejercer en este nuevo país. De cualquier manera, esto aplica a las condiciones de mercado pre-Covid, donde el mundo profesional corre a un ritmo continuo y calmo, mientras que el internet y la posibilidad de estar siempre online trae consigo un ritmo acelerado, el cual se rige por la toma de decisiones rápidas y certeras, esta hiper-velocidad no considera la regularización de servicios profesionales, pues carece de tiempo para realizar los trámites legales que permitirían a un profesional ofrecer servicios a determinado país, lo cual cuestiona reglamentaciones profesionales, como la colegiación profesional, pago de impuestos, inscripción como trabajador autónomo o empresa y facturación, estas que anteriormente estaban condicionadas a una región definida.
Si usamos como ejemplo la forma en que los países europeos anuncian licitaciones de proyectos en plataformas de contratación pública dentro de la Unión Europea vemos que las postulaciones digitales y cotizaciones requieren de verificación de firma electrónica oficial, la cual solamente es concedida por entidades como “LuxTrust” una empresa establecida en Luxemburgo la cual verifica la legalidad y veracidad del perfil digital de cada postulante, evitando así las estafas y las falsas cotizaciones, pues dentro el contexto Europeo un proyecto ofertado en Alemania puede ser cotizado y ejecutado por una empresa en Portugal. Pero, ¿Cómo está relacionado con Guatemala?, datos recolectados en 2016 por parte de la consultora KPMG en donde establecen Guatemala como un competidor directo con países como India, China y Malasia gracias a los más de 10 años prestando servicios BPO, Business Process Outsourcing, una industria que junto a salud y turismo, según el Ministerio de Economía, en 2015 generaron US$524.5 millones, lo cual indica que como país somos grandes exportadores de servicios profesionales.
La oferta y demanda en un mercado digital y global mediante plataformas de contratación pública podrá ser implementada y regulada, Mediante los siguiente paradigmas, se explicará cómo este pudiera definir un modelo de negocio digital que existe en paralelo al mercado actual.
PRIMER PARADIGMA
Colegiación profesional global
En el pasado arquitectos locales diseñan para su comunidad, cuando el mundo se globalizó diferentes compañías expandieron sus operaciones hacia los diferentes continentes, sin embargo, la mayoría de sus empleados eran residentes del país en donde la oficina remota se ubicaba. En la actualidad, las oficinas y sus empleados no son definidas, su personal regularmente necesita ser local o internacional, el número de colaboradores crece o se encoge según lo requiera el proyecto. Gracias al espacio digital y la tendencia al emprendimiento permite que un Arquitecto produzca diferentes proyectos en simultáneo, no para la misma compañía, pero para diferentes clientes ubicados en diferentes continentes, regiones y países.
Para facilitar estas operaciones deberá existir una entidad, la cual llamaré provisionalmente, “Colegio/Instituto Internacional de Arquitectura” que permita a los profesionales prestar servicios mediante medios digitales. Esto deberá dar respaldo al compromiso del profesional oferente y cliente, evitando así los fraudes, estafas y contratos inconclusos. Dicho Instituto deberá contar con amplio catálogo de normas constructivas internacionales para garantizar la calidad de los servicios así como constantes actualizaciones internacionales.
SEGUNDO PARADIGMA
Banca flexible
Dado que los servicios profesionales se contratarán mediante medios digitales la forma de pago deberá ser mediante una banca flexible, global y digital, estos pueden usar como referencia la moneda de mayor predominancia en el mercado o mediante la moneda local de la región en donde se presten servicios. Entidades como “Transferwise” una banca electrónica fundada en 2010 y que opera en Londres inició operaciones dando servicio a viajeros frecuentes en donde usuarios pueden convertir, enviar, recibir y retirar dinero rápidamente en 54 tipos diferentes de moneda según itinerario de viaje. Ahora Transferwise cuenta con una sección “Business” como parte de sus servicios, lo cual permite recibir transferencias monetarias desde cualquier parte del mundo.
TERCER PARADIGMA
Impuestos
Al ejercer profesionalmente, es claro que los impuestos deberán ser declarados en el país de origen del profesional oferente, beneficios de reducción de los mismos pueden ser enlazados mediante una deducción del monto de Colegiatura Internacional deducible de impuestos.
CUARTO PARADIGMA
Barrera de Idioma
El mundo digital y la tecnología avanzan continuamente, las barreras del idioma no representan una limitación, actualmente es posible visitar páginas cuyo idioma original es rápidamente traducido por nuestro computador con la ayuda de softwares automáticos. Documentos de consulta, códigos y manuales de construcción deberán ser parte de un repositorio digital adaptado al lenguaje técnico de cada región.
QUINTO PARADIGMA
Movilidad
El mundo Virtual modifica el Mundo Físico. Dado que los profesionales ofrecerán servicios digitales es probable que en determinado momento estos necesiten viajar a las regiones y países donde manejen proyectos, para supervisión, corrección y resolución de problemas de obra.
La movilidad internacional deberá ser un beneficio para los profesionales asociados al “Colegio/Instituto” mencionado en el primer paradigma. Claro, las fronteras seguirán existiendo así como los controles de ingreso y salida territoriales, pero para los asociados, un apartado en pasaporte o código de colegiado permitirá una libre movilidad sin requerimiento de visado durante el lapso de tiempo en el que el proyecto en determinado país sea ejecutado.
Osmin Avalos
Advanced Architect